Lo dicen hoy en marketingdirecto.com, «La tradicional publicidad impresa deja mayor huella en la memoria que la desplegada en los más modernos soportes digitales. Así lo concluye al menos un nuevo estudio neurocientífico desarrollado en Alemania por el Instituto Siegfried Vögele«.
No es nada nuevo, pero si es destacable que ha sido certificado por un estudio científico, donde segun nos comentan en el post de marketingdirecto.com: «tiene mucho que ver, según los investigadores del Instituto Siegfried Vögele, el hecho de que el consumidor pueda tocar y tener contacto físico con este tipo de publicidad».
Es tan bien evidente que el volumen de publicidad impresa ha descendido, pero esto se debe sobre todo a la coyuntura económica actual, la archiconocida «crisis». Independientemente las empresas seguirán usando la publicidad impresa, que paradójicamente ahora resulta mucho más económica que antes debido a la bajada generalizada de precios de las imprentas, una logística más efectiva y por supuesto a un diseño cada vez más impactante gracias a las posibilidades gráficas actuales.
A aquellos agoreros del uso del papel les recordaré aquel «rumrum» de los años en que empezó a masificarse el uso de la informática «El papel dejará de usarse, todos los documentos serán electrónicos», … Gurús efímeros.